La actual pandemia ha generado grandes crisis en muchos
sectores productivos nacionales, no así en el sector agropecuario que ha podido
trabajar con normalidad. En este sentido considera que “no solamente nos mira
la sociedad desde una situación distinta sino que el Estado también nos mira de
esa manera”. Además menciona que la problemática no sólo se da por el proceso
de intervención en sí sino porque “se
abre otra puerta: el socio mayoritario del Grupo Vicentin es el Glencore. Es
una empresa multinacional Suiza y ya dijo que la negociación, si se estatiza,
se va a los Tribunales de Londres. No les importa nada, se analiza el momento y
hoy les convendrá esto y lo hacen y los argentinos no sólo nos vamos a tener
que hacer cargo de los 1450 millones de dólares que debe Vicentín sino que
vamos a tener que pagarle la indemnización a Glencore”, expresó remarcando el
rechazo frente a lo que considera avasallamiento de la propiedad privada.
Situación
de los productores
La deuda millonaria de la Empresa Vicentin alcanzó a
numerosos productores y acopios en todo el país, “las cooperativas que comercializaron
a través del corretaje de ACA cobraron. Distinto es el caso de los que no lo
hicieron, esos no cobraron como tantísimos productores que lo hicieron a través
de otros corretajes y tampoco cobraron. La preocupación más grande es si van a
cobrar y cuando. En los concursos se pesifica y se va a pesificar al 4 de
diciembre de 2019. Después te van a pagar cuando tengan plata, no sabes cuándo
y vas a cobrar en pesos; acá desde el vamos el productor sabe que hay una
pérdida importante y que va a ser un golpe en la economía de él. Si interviene
el Estado y estatiza les garantizo que no cobran absolutamente nada”.
¿Qué pasó
con Vicentin?
“Vicentín es una firma de 90 años, no es una empresa que
tenga un día. La diferencia que puede tener a favor Vicentin es que mucho del
dinero que se debe a los Bancos está invertido; son todas empresas modernas,
con un trabajo extraordinario. La locura esta que se desató en el 2018 donde
tomaron muchos créditos en dólares, con las devaluaciones que hubo, duplicaron
y triplicaron la deuda y empezaron a patinar; uno debe pensar también que algún
mal manejo hubo, alguna administración que no tomó los recaudos necesarios y
terminó en esto”.
“Veo al
Kirchnerismo detrás de esto”
A su vez, considera que es importante la inclusión de nuevos
actores en la negociación, pero es necesario que se les ponga la información
sobre la mesa y reglas del juego claras. Su principal molestia es “que lo que
interesa es el mercado de granos, Vicentin es sólo una consecuencia, una puerta
de entrada. A mí no me cabe ninguna duda de que atrás de esto está La Campora y
su Jefa Cristina Fernández de Kirchner. Es el sueño de ellos, sueñan con los
dólares y los dólares genuinos que la República Argentina recibe (y no los
presta a nadie) del Agro y la Agroindustria. Detrás de todo esto hay un trasfondo
del que nosotros sólo conocemos una parte”.
En lo referido a la reacción de los sectores a los que la
Empresa les adeuda grandes sumas, Marco resalta la existencia de empresas,
productores y acopios que aún teniendo que recibir pagos por parte de Vicentín
muestran su apoyo a la causa que no sólo tiene que ver con la empresa en
particular sino con el “atropello flagrante a la propiedad privada, que genera
un precedente muy peligroso”.